miércoles, 25 de febrero de 2015

Y ahora ...

Creo que ahora estoy en ese tercer momento importante en mi alimentación.

Hace un tiempo que noto que cuando abuso de los cereales no me sientan especialmente bien.  Generalmente como espelta y trigo, algunas veces kamut y maíz, todos ellos ecológicos.  Me saturo de cereales, y me pasa bastante, y me vienen unas ganas terribles de comer verduras, tanto crudas como al vapor o cocidas ;)

Además, me siento agotada últimamente, sin energía física.  Por el contrario, tengo mucha energía mental y ganas de hacer cosas, pero el cuerpo no me tira.  Por lo que de nuevo, me paro y escucho a mi cuerpo y atiendo sus necesidades lo mejor que puedo.

Me están llegando muchas cosas y personas a mi vida realmente interesantes.  Tanto, que haré una entrada con todas ellas, y lo que me aportan.

Una de ellas ha sido Ana Moreno, con una manera de entender la alimentación sana tan respetuosa como intento ser yo en otras facetas de mi vida, cosa que me ha cautivado.  Por eso me atrae y he empezado a incorporar algunas cosillas, que espero me ayuden y hagan que incorpore muchas más.

He empezado a hacer la cura del limón.  Creo que tengo necesidad de depurar antes de seguir!  Consiste en lo siguiente.

Antes de empezar con ella, hay que eliminar algunas cosas:

-        Alimentos de origen animal.  Estos alimentos han ido desapareciendo de mi dieta por razones de salud, me sentía mejor sin ingerirlos.  Aunque me parece fantástica la opción del respeto hacia los animales, que por supuesto comparto.

-        Alimentos de origen vegetal.  Café, té, zumos de frutas endulzados, azúcar blanco, sal común, disminuir el consumo de frutos secos (sólo tomarlos crudos), cacao, especias y condimentos fuertes.  En este caso, mi único “problema” es el té, que me encanta, tanto verde como rojo, y a veces, blanco ;)

-        Salsas picantes o muy condimentadas, golosinas, pasteles, chocolate, helados, sodas, colas, licores, alcohol y tabaco.  Aix, el chocolate, pero si lo tomo del bueno, del de 80% de cacao.  Bueno, es por poco tiempo, jejejeje

Además, hay que tener en cuenta:

-        No comer nada frito.  Mejor crudo, a la plancha, al vapor o cocido.  Todavía como fritos, no muchos.

-        No utilizar mostaza ni pimienta, sino limón o vinagre de manzana o de umeboshi.

-        Comer despacio y con moderación.  Lo de comer despacio es todo un reto para mi, lo intentaremos.

-        Beber dos litros diarios de líquidos fuera de las comidas (agua, infusiones depurativas, zumos naturales de verduras, …)

-        Evitar tensiones y estrés durante la comida.  Ana Moreno habla de no comer viendo la televisión.  Ostras, hace tiempo que desapareció de nuestras vidas, desde entonces decidimos lo que queremos ver y cuando hacerlo, simplemente con un disco duro o conexión a internet es posible.

-        Reposar de 15 a 30 minutos después de la comida.  Cosa que normalmente hago, aunque tengo que reconocer, que otras no.

-        Tomar la fruta separada de las comidas principales.  Esto hace tiempo que lo practico.  De hecho, últimamente mis mañanas son de frutas e infusiones, y la verdad es que me siento muy bien.  También tengo que decir que aprovecho cualquier momento de sol para tomarlo, y este invierno está siendo muy generoso, al menos donde nosotros vivimos.

-        Tomar cada vez fruta de una sola clase, sin mezclar varios tipos.

-        Tomar alimentos naturales, integrales y ecológicos.  El porcentaje de alimentos procesados que compramos es cada vez menor, y espero poder llegar a eliminarlos del todo.

-        Realizar la última comida del día al menos dos horas antes de irse a la cama.  Este es uno de mis grandes retos para este año.  Son muchos los días que como y me duermo con menos de una hora de diferencia.

-        Eliminar lácteos o consumirlos solamente fermentados (yogur y kéfir) y preferiblemente de cabra.  Este es otro de los alimentos que han ido desapareciendo hasta morir de nuestra dieta.  Empezamos cambiando a los de soja ecológicos, después nos pasamos a los de cabra ecológicos, hasta que desaparecieron.

La cura del limón consiste en tomarte el zumo de un limón en ayunas el primer día, e ir aumentado la cantidad de limones de uno en uno hasta llegar al décimo día de la cura que te tomarás el zumo de diez limones.  A partir de entonces hay que ir rebajando de uno en uno los limones cada día, es decir, el undécimo día hay que volver a tomar el zumo de nueve limones, hasta llegar al día veinte de la cura que tomarás de nuevo el zumo de un limón.

El zumo de limón ha de ser sin agua ni azúcar.  Se recomienda tomarlo con una caña para evitar dañar el esmalte de los dientes.

Puedes encontrar esta cura en la web de Ana Moreno, aquí tienes el enlace directo http://flexivegetarianos.com/la-cura-de-limon/, aunque te la recomiendo enterita http://flexivegetarianos.com/

Llevaba cinco días de cura del limón y me ha pillado un virus estomacal, que me ha obligado a llevar reposo y prácticamente a un ayuno total, ya que lo poco que he intentado ingerir (sorbitos de agua, de infusión digestiva o de caldo de verduras) me ha sentado fatal.  Aprovecharé este ajuste de mi cuerpo para ir incorporando los cambio cuando me encuentre mejor.

Espero que ayude / inspire a alguien lo que os voy a ir contando en este blog.  Salud!

miércoles, 18 de febrero de 2015

Y así empezó todo

La web de Mejor si es natural nació en septiembre del 2011.  Aunque hubiéramos querido hacerlo poco a poco, un acontecimiento nos hizo acelerar su nacimiento.  La desescolarización de nuestro hijo Adrián, y la no comprensión por parte de la empresa donde trabajaba cuando solicité un cambio de horario para poder compaginar trabajo y presencia con mi hijo fueron el detonante.  Hoy le agradezco a dicha empresa su decisión ;)

Nuestro interés por los productos naturales y ecológicos surgió a partir de una especial atención a nuestra alimentación.

Ha habido dos momentos muy importantes en el cambio de mi alimentación, uno inmensamente feliz y el otro, terriblemente triste.  El primero fue en el 2006, con el nacimiento de mi hijo.  Fue una época de formación en alimentación, y de incorporación de algunos cambios, creo que los más importantes fueron:

-        *  la eliminación del azúcar blanco de mi dieta,
-       *   de las harinas refinadas, harinas blancas,
-       *   y de la leche de vaca.

Y la consiguiente introducción de sustitutos.

Tengo que decir, que la eliminación de estos tres alimentos fue en casa.  No llegué al paso de examinar la comida que compraba elaborada, ya que dichos “alimentos” están en la mayoría de productos elaborados.  Eso sí, miré nuestra despensa y tiré estos tres productos.  Desde ese momento no han vuelto a entrar en casa de una manera consciente.

La formación que busqué y que me convenció fue la que me ofreció Dorte Froreich (Salud al plato).  Fueron varios cursos los que realicé con ella durante un periodo de tiempo más o menos largo, creo que fueron unos dos años.  Recuerdo aquella época con cierta nostalgia.  Adrián era muy pequeño y venía conmigo.  Siempre ha sido un niño de poco dormir, pero en los cursos se quedaba roque casi toda la sesión en mis brazos, y me permitía estar al 90% pendiente de lo que nos explicaban.  Me encantaba sentir a mi hijo sobre mi durmiendo tranquilo.

El segundo fue en el 2010, cuando diagnosticaron un cáncer a mi padre, del cual murió a los cuatro meses.

Hasta ese momento todavía comprábamos algunos productos no ecológicos, y no solía leer las etiquetas concienzudamente, cosa que ahora hago ;)

Los cambios en este caso fueron optar por la compra de productos ecológicos, y la mayor presencia de productos frescos en nuestra dieta (fruta y verdura).

Los cambios radicales, en nuestro caso, son difíciles de sostener en el tiempo.  Digo esto porque a veces tengo la necesidad de comprar fruta o verdura y no tengo la opción de ir al payés al que normalmente vamos.  La solución es fácil, la compro donde sea.  Bueno, tengo que ser sincera, hay sitios en los que no entro por principios, y no voy quiero hacerles publicidad, aunque sea mala.  Lo mismo me pasa con otro tipo de alimentos, pero siempre informándome de los ingredientes.

Nos permitimos hacer algunos extras en casa, teniendo un niño de ocho años, es difícil no hacerlos.  Pero intento no hacer rutina de ellos, y explicarle siempre el por qué no están presentes en nuestra alimentación jejejeje

Hablo en primera persona porque, aunque en casa somos tres, cada uno tiene que llevar su propio camino, en función de lo que piensa, de cómo se siente, y del momento que esté viviendo.

Un tiempo después apareció la fantástica Dra. Odile Ferández con su fantástica web Mis recetas anticáncer, donde hay un montón de recetas saludables y mucha información.  Además, en nuestra web, puedes encontrar su libro Mis recetas anticáncer, lo puedes comprar aquí.  También ofrece un curso online, Alimentacion anticáncer, el cual realicé y os recomiendo, podéis encontrar información del mismo aquí.


También conocí a Olga Cuevas y sus dos fantásticos libros, uno de alimentación, El equilibrio a través de la alimentación, que puedes comprar aquí, y otro de remedios naturales, Tratamientos naturales al alcance de todos, que lo encontrarás aquí.  También tuve la oportunidad de hacer el curso de remedios naturales que imparte Olga Cuevas en el Institut FP Sanitària Roger de Llúria.



Estos tres libros forman parte de mis tesoros.